AmecoPress. La destrucción de empleo que ha acompañado en España a la crisis económica ha modificado el mapa laboral y ha desdibujado las desigualdades existentes entre mujeres y hombres. Ante esta situación, CC.OO exige que las políticas de fomento del empleo, junto a las medidas que se adopten para generar un nuevo modelo de desarrollo económico y productivo, tengan presente el impacto de género de las mismas.
La secretaría de la Mujer del sindicato ha emitido un comunicado en el que explica que “El elevado incremento durante el último año y medio del paro entre los varones les ha convertido en los protagonistas y destinatarios de las medidas de soluciones al desempleo y de protección social”.
Así, “el marcado sesgo androcéntrico en las medidas económicas adoptadas hasta ahora para la creación de puestos de trabajo (“Plan E” fundamentalmente), siguen discriminando a las mujeres que continúan en peor situación en el mercado de trabajo y con menores cuotas de protección social”.
CC.OO. insiste en que debe tenerse en cuenta las desigualdades estructurales con que se enfrentan las mujeres en el mercado de trabajo y las principales brechas de desigualdad. El sindicato, argumenta su postura con algunos datos relevantes.
La secretaría de la Mujer del sindicato ha emitido un comunicado en el que explica que “El elevado incremento durante el último año y medio del paro entre los varones les ha convertido en los protagonistas y destinatarios de las medidas de soluciones al desempleo y de protección social”.
Así, “el marcado sesgo androcéntrico en las medidas económicas adoptadas hasta ahora para la creación de puestos de trabajo (“Plan E” fundamentalmente), siguen discriminando a las mujeres que continúan en peor situación en el mercado de trabajo y con menores cuotas de protección social”.
CC.OO. insiste en que debe tenerse en cuenta las desigualdades estructurales con que se enfrentan las mujeres en el mercado de trabajo y las principales brechas de desigualdad. El sindicato, argumenta su postura con algunos datos relevantes.
En cuanto a la tasa de actividad, los hombres han alcanzado un techo del 68,14%, frente a las mujeres con un 51,70%. La brecha en la tasa de empleo es del 13,60% en detrimento de las mujeres.
El empleo el tiempo parcial es el mayor agente de desigualdad de género
En cuanto al tipo de contrato, el 97,18% de hombres disfrutan de un contrato indefinido a tiempo completo, frente al 79,96%, situándose la brecha en un 17,22%. En los contratos a tiempo parcial nos encontramos con la situación contraria: un 2,82% de hombres frente a un 20,04% de mujeres.
Los contratos temporales se distribuyen del siguiente modo: a tiempo completo, el 87,17% de hombres y el 65,10% de mujeres; a tiempo parcial, el12, 83% de hombres y 34,90% de mujeres.
La brecha salarial en jornada completa es del 27,5% y en jornada parcial el 24%, menor, pero hay que tener en cuenta que sólo el 5% de los varones están en esta modalidad. También la tasa de temporalidad femenina (27%) es superior a la masculina (24%). La excedencia por cuidado familiar en las mujeres es del 94,58% mientras que la de los hombres no llega al 6%.
“Abordar la igualdad de género ha de ser un elemento central de todos los componentes de la creación de empleo: en los marcos macroeconómicos, en las políticas activas de empleo, en el desarrollo de las cualificaciones y la empleabilidad y en las políticas públicas de desarrollo de servicios para los cuidados de ciudadanía”, concluye el comunicado de CC.OO.
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