Decididas a acabar con siglos de explotación y discriminación, las trabajadoras rurales y forestales brasileñas idearon la Marcha de las Margaridas, una estrategia que les permite conquistar visibilidad, reconocimiento social e importantes reivindicaciones.
La manifestación fue coordinada por la Confederación Nacional de Trabajadores de la Agricultura (Contag), que agrupa a más de cuatro mil sindicatos.
Realizada cada cuatro años en homenaje a la colega y líder sindical Margarida Alves -asesinada el 12 de agosto de 1983 por encargo de propietarios rurales y dueños de centrales azucareros de Paraíba-, la cuarta Marcha efectuada el 17 de agosto, en Brasilia, tuvo como lema desarrollo sostenible, pero con justicia, autonomía, igualdad y libertad.
Para muchas de las cerca de 70 mil participantes, ese hecho tal vez fue clave para el gran paquete de medidas anunciado por la presidenta, Dilma Rousseff, en la clausura de la Marcha, como respuesta al pliego de peticiones presentado en el Palacio de Planalto (sede del gobierno) en julio pasado.
Al respecto, la secretaria de Mujeres de la Contag, Carmen Foro, evaluó de positiva la atención oficial a las reivindicaciones y recordó que desde el 2000 las mujeres brasileñas han venido conquistando la adopción de políticas públicas.
La manifestación fue coordinada por la Confederación Nacional de Trabajadores de la Agricultura (Contag), que agrupa a más de cuatro mil sindicatos.
Realizada cada cuatro años en homenaje a la colega y líder sindical Margarida Alves -asesinada el 12 de agosto de 1983 por encargo de propietarios rurales y dueños de centrales azucareros de Paraíba-, la cuarta Marcha efectuada el 17 de agosto, en Brasilia, tuvo como lema desarrollo sostenible, pero con justicia, autonomía, igualdad y libertad.
Para muchas de las cerca de 70 mil participantes, ese hecho tal vez fue clave para el gran paquete de medidas anunciado por la presidenta, Dilma Rousseff, en la clausura de la Marcha, como respuesta al pliego de peticiones presentado en el Palacio de Planalto (sede del gobierno) en julio pasado.
Al respecto, la secretaria de Mujeres de la Contag, Carmen Foro, evaluó de positiva la atención oficial a las reivindicaciones y recordó que desde el 2000 las mujeres brasileñas han venido conquistando la adopción de políticas públicas.
"Lo que vimos ahora es la implementación de esas políticas conquistadas", subrayó Foro, quien, pese a los avances, apuntó que las mujeres nunca vamos a estar satisfechas, siempre vamos a querer más, porque "es propio de la naturaleza de la mujer batalladora querer mejorar sus condiciones de vida".
Horas antes de la clausura de la cuarta Marcha, con la presencia de la mandataria brasileña, unas 70 mil trabajadoras rurales y forestales marcharon por la avenida principal de esta capital con grandes telas e inmensos carteles.
La mayoría de ellos denunciaban la alta concentración de la tierra en Brasil y rechazaban el actual modelo de producción rural, porque favorece el latifundio que acaba con el medio ambiente y expulsa de sus lugares de residencia a millones de pobladores del campo.
En acto frente en la Explanada de los Ministerios, la secretaria nacional de la mujer del Partido Comunista de Brasil, Liege Rocha, exaltó que la alta participación en esta manifestación constituye una demostración del avance de las mujeres y su voluntad de transformar Brasil y ser protagonistas de su historia.
Entre los éxitos de las marchas anteriores destacan la jubilación de las trabajadoras rurales a los 55 años, la emisión de documentos de las mujeres que no conseguían acceso a políticas públicas como Bolsa Familia y la titulación en la división de la reforma agraria en nombre de ellas.
Dilma Rousseff: me considero una presidenta Margarida
En su discurso de clausura, en el Pabellón de Exposiciones del Parque de la Ciudad, la mandataria brasileña enumeró una serie de acciones de su gobierno para favorecer a las mujeres del campo y la floresta, garantizó un diálogo permanente y periódico con ellas y se declaró una “Presidenta Margarida”.
Exaltó que las mujeres representan cerca de la mitad de la población rural y son el cimiento generoso que da soporte a millones de familias e infantes, por lo que -acotó- el estado brasileño tiene la obligación de garantizar sus derechos.
Medidas y acciones
Rousseff entregó a la Contag un cuaderno con la respuesta oficial a las peticiones, el cual destaca que entre las conquistas de la cuarta Marcha sobresalen la construcción y equipamiento de 16 unidades básicas de salud entre este año y el próximo.
También se implantarán centros de referencia en salud, así como la Red Cegonha (Red Cigüeña), destinada a atender a la mujer durante todo el embarazo y hasta que el bebé cumpla los dos años de vida.
Asimismo, se prevé la realización de la campaña nacional de prevención del cáncer de cuello de útero y de mama, así como la elaboración de un plan integrado de vigilancia de las poblaciones expuestas a los agrotóxicos.
El cuaderno incluye además el incremento de la compra a la agricultura familiar de los productos para la merienda escolar y asegurar la participación de las organizaciones femeninas como representantes de la sociedad civil en el Consejo de Alimentación Escolar.
La integración de la iniciativa Producción Agroecológica Integrada y Sostenible (con muy buenos resultados en la autonomía de las mujeres productoras rurales) al plan Brasil sin Miseria y el aumento del presupuesto para incentivar la agricultura familiar, resultan otras de las respuestas oficiales a las demandas de las trabajadoras rurales y forestales.
Igualmente la creación de un grupo interministerial para discutir criterios con vistas a la implantación de jardines infantiles en la zona rural, y la creación de tres unidades fluviales en la Amazonía a fin de emitir documentos que den ciudadanía a las mujeres del campo y la floresta.
Se garantizará un mínimo de 30 por ciento de mujeres en las personas beneficiadas con el servicio de asistencia técnica agrícola.
La participación conjunta de las mujeres en la escritura de la propiedad de la tierra y el interés del gobierno de viabilizar el acceso a casa, agua potable, energía eléctrica, avenidas, servicios de educación y salud, y de apoyar la estructura productiva con crédito, asistencia técnica y garantía de comercialización, son otras acciones incluidas en el cuaderno.
Además, la institución de un grupo de trabajo para la elaboración de un programa nacional de agroecología y el inicio del diagnóstico de todos los asentamientos rurales del país con vistas a definir cómo encaminar la cuestión del acceso a la tierra de ahora en adelante.
Recibido el cuaderno con las respuestas del Gobierno, la Contag y la coordinadora nacional de las trabajadoras rurales adelantaron que, junto con la red de alianzas de la Marcha de las Margaridas, analizarán todo el contenido y continuarán el diálogo a fin de alcanzar otras reivindicaciones que no han tenido avances hasta el momento.
Fuente: PL
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