Los hombres que firmamos esta Carta reconocemos la labor que el movimiento de mujeres ha realizado por la conquista de sus derechos. Una lucha de siglos que ha mejorado considerablemente la situación de las mismas, pero, ante todo, ha hecho posible una sociedad más equilibrada y unas relaciones más equitativas entre mujeres y hombres.
Somos conscientes de que aún vivimos en una sociedad desigual en las relaciones entre los sexos. Una injusticia que, en determinados ámbitos, sigue dando privilegios a los hombres y discriminando negativamente a las mujeres, relegándolas a un segundo plano en numerosos espacios.
Entendemos, asimismo, que el avance de las mujeres no se ha correspondido ni con una implicación generalizada de los hombres en estas justas reivindicaciones ni con el consecuente equilibrio, reformulación y adecuación de los papeles que ambos sexos desempeñan en los espacios públicos y privados.
Como resultado de ello, las mujeres continúan hoy en día soportando numerosos obstáculos en el ámbito público que, combinados con las excesivas cargas que se asignan en lo privado, tienen serias repercusiones negativas para su calidad de vida y sus oportunidades de desarrollo personal y participación social.
Afirmamos que la manifestación más terrible de esta desigualdad es la violencia de género. Una violencia ejercida cruel y cobardemente por algunos hombres contra las mujeres motivados por sus prejuicios sexistas. Una violencia que rechazamos con contundencia, invitando a toda la sociedad a unirse a esta repulsa, y conminando a los agresores a que cesen en sus maltratos y sean hombres respetuosos e igualitarios.
No nos gusta la imagen social que tradicionalmente asocia a los hombres a la dominación y nos desvincula de lo afectivo. Abogamos por una sociedad que reformule sus valores, garantice una relación más igualitaria entre ambos sexos y establezca un reparto de tareas y responsabilidades equilibrado y no estereotipado.
Por todo ello, asumimos los siguientes compromisos:
*
o Compartir y apoyar las justas demandas del movimiento de mujeres contra las discriminaciones de género, reivindicando igual dignidad, derechos y libertades para ambos sexos.
o Denunciar y manifestar públicamente nuestro rechazo hacia cualquier forma de sexismo, haciendo especial hincapié en nuestra más firme condena de la violencia de género.
o Defender un modelo de sociedad basado en el respeto a las diferencias y la igualdad de valor entre los seres humanos.
o Implicarnos activamente, desde nuestros diferentes ámbitos de responsabilidad, en el desarrollo de acciones concretas para lograr una sociedad más justa para ambos sexos, libre de prejuicios de género y en la que el reparto de las responsabilidades en la vida pública y privada, la economía, el trabajo remunerado y la participación social sea equitativo.
o Evitar el uso de cualquier forma de representación que estereotipe a los sexos y subordine e infravalore a las mujeres.
o Reconocer y valorar las diversas contribuciones que las mujeres han hecho y hacen día a día al patrimonio cultural, la economía, la convivencia humana, la política y todos los ámbitos de la sociedad y el desarrollo de nuestra tierra.
o Animar al resto de los hombres de Canarias a unirse pública y activamente a esta lucha por la Igualdad, convencidos de que éste es un camino necesario y beneficioso para todas y todos.
Firmantes
No hay comentarios:
Publicar un comentario