El 25 de noviembre de 1960, son violadas y asesinadas las hermanas Mirabal, reconocidas por su liderazgo en la oposición a la dictadura Dominicana de Trujillo. Desde el primer Encuentro Feminista celebrado en Colombia en 1981, en el que se propone esta fecha como Día Internacional Contra la Violencia hacia la Mujer , las feministas ratificamos nuestra denuncia a la violencia estructural que sobre nuestros cuerpos y subjetividades se cometen diariamente.
La experiencia de ser mujer esta atravesada por situaciones de violencia ejercida en forma material o simbólica y abarca todas las esferas de la vida cotidiana desde la relación con el cuerpo y la sexualidad, los vínculos personales, la utilización de los espacios públicos, las situaciones laborales, la imposición de obligaciones, la negación de derechos, etc..La violencia estructural y generalizada cumple una función política al mantener la opresión, cuya finalidad es el control y la apropiación de nuestro cuerpo por parte del universal masculino. No cabe duda que el patriarcado como sistema de dominación necesita la profundización de las desigualdades de género. El empleo de la violencia para mantener esta situación, produce en muchas uno de los recursos más importantes del control que es el miedo.
Una de las formas más acabadas y violentas de disciplinamiento que se construye sobre el cuerpo de las mujeres, es la prostitución, porque supone que nuestro cuerpo y sexualidad está siempre subordinado a la satisfacción de los deseos y necesidades masculinas.
La trata de mujeres que en esta provincia provoca el secuestro y desaparición de muchas, tiene sus raíces directas en la prostitución. El patriarcado propone la existencia de mujeres que cumplen el rol social de ser madres-reproductoras y de otras destinadas a satisfacer el "irrefrenable" deseo sexual masculino, es decir, "las putas". La división entre putas y no putas violenta, estigmatiza a todas las mujeres porque como sostiene Marcela Lagarde, la prostitución no encuentra su causa en cada mujer, sino en la construcción social de las mujeres, concebidas como seres de otros y para otros, ya sean madres o putas "toda la sexualidad femenina está prostituida al servicio de los hombres".
El patriarcado enseña a los varones de todas las clases que pueden hacer uso, disponer, someter y apropiarse del cuerpo de las mujeres, y por otro lado impone a las mujeres de todas las clases una sexualidad colonizada y subordinada. Así es como este sistema ejerce toda su violencia sobre nosotras, al concebir a nuestros cuerpos como factibles de ser usados por otros, y también por supuesto, de ser comprados y vendidos. Esta enajenación, es exacerbada por el capitalismo que concreta un enorme negocio en base a la objetivación de los cuerpos de mujeres y niñas, transformándolos en mercancías que cotizan en el mercado.
Una de las políticas más empecinadas del patriarcado es la de apropiación de la fuerza productiva y reproductiva de las mujeres, por lo tanto, normar sobre la sexualidad de las mismas, decidir sobre su cuerpo, imponer sentidos, tabúes, calificar, descalificar, invisibilizar las verdaderas problemáticas de salud sexual y reproductiva son otras formas de violencia que llevan a miles de mujeres a la muerte por embarazos, partos y abortos en situaciones de clandestinidad. Al decir también de Marcela Lagarde, si no se evitan estas muertes, es porque nuestras sociedades hacen uso del femicidio como un recurso extendido y aceptado. Las concepciones que le niegan a las mujeres el derecho a decidir sobre su cuerpo, sobre su sexualidad y sobre su maternidad, consideran a éstas en estado de minoridad, impiden su constitución como sujetas políticas con capacidades éticas, intelectuales y de decisión responsables.
La violencia de género es una de las más graves violaciones a los derechos humanos de las mujeres. Reconocer, nombrar su existencia, hacer visible lo que los diversos mecanismos de control naturalizan y normalizan, permitirán identificarlas, establecer los vínculos genéricos, sociales y culturales diferenciados para cada sexo y emprender el proceso de deconstrucción patriarcal y creación de nuevas alternativas de relación entre las humanas y humanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario