La violencia doméstica y los ataques sexuales contra las mujeres aumentaron en Estados Unidos un 25 por ciento en comparación con el año anterior, revela un estudio divulgado, según reporte de PL.
No resulta casual que los EEUU sea uno de los pocos países que se ha negado a suscribir los Tratados y Convenciones Internacionales en Materias relacionadas con la Mujer.
No resulta casual que los EEUU sea uno de los pocos países que se ha negado a suscribir los Tratados y Convenciones Internacionales en Materias relacionadas con la Mujer.
Un sondeo Nacional de Víctimas del Crimen reportó que 248 mil 300 mujeres fueron objeto de asalto sexual el pasado año, mientras se contabilizaron medio millón de delitos contra ellas cometidos por sus parejas, un 42 por ciento más que en 2006.
Según el informe, esas cifras podrían se superadas este año, en parte por la crisis económica que afecta al país.
Este se ha convertido en un problema nacional serio y requiere no sólo tratamiento y recursos para la protección de las víctimas, sino tener una mayor visibilidad y énfasis en la prevención, señala el diario La Opinión.
Tienen razón los que piden una mayor atención a este problema, pero lamentablemente, y a pesar de lo alarmante de este reporte, la mayoría de los medios de comunicación no le puso mucha atención, subraya el periódico.
Para el rotativo, esos delitos suelen crear víctimas invisibles, pero el sufrimiento que causan es muy real.
Ante esa situación, demanda enfrentar esa situación como una prioridad de las autoridades y gobiernos.
De acuerdo con estadísticas, en Estados Unidos un 30 por ciento de las mujeres víctimas de homicidio fueron asesinadas por sus parejas y más de la mitad de las norteamericanas fueron golpeadas al menos una vez en la vida.
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