Elisa SasvínCerigua.- Representantes de diferentes organizaciones de la sociedad civil, entidades públicas, magisterio y personal del Centro de Atención para Discapacitados (CADEP), entre otros, rindieron un homenaje póstumo a Gladys Maribel Hernández Bautista de Sánchez, quien falleció trágicamente.
Las exequias se realizaron en las instalaciones de dicho centro, del cual ella fue confundadora, Directora y Presidenta de la Asociación Probienestar de los Discapacitados de El progreso (ABIDEPRO), a través de la cual se gestionaban los fondos para el funcionamiento del CADEP, fundado hace cuatro años.
Hernández era más conocida como “la seño Gladys”, en todo el departamento; fue capaz de dejar un gran ejemplo a las y los progresanos, pues sus luchas por favorecer a las personas con capacidades diferentes, de escasos recursos económicos, fueron conocidas en este departamento.
Por su parte, el Director de la Escuela tipo Federación de Guastatoya y el subdirector del CADEP, Romeo Archila, la calificaron como una mujer fuera de serie, además de ser una madre y maestra única, por sus cualidades.
Con muestras de suma consternación, el personal, ex alumnos, familiares y amigos, rindieron el último adiós a “la seño Gladys”, confiados en que alguien siga sus pasos para que el centro continúe brindando sus servicios a cientos de personas.
Las exequias se realizaron en las instalaciones de dicho centro, del cual ella fue confundadora, Directora y Presidenta de la Asociación Probienestar de los Discapacitados de El progreso (ABIDEPRO), a través de la cual se gestionaban los fondos para el funcionamiento del CADEP, fundado hace cuatro años.
Hernández era más conocida como “la seño Gladys”, en todo el departamento; fue capaz de dejar un gran ejemplo a las y los progresanos, pues sus luchas por favorecer a las personas con capacidades diferentes, de escasos recursos económicos, fueron conocidas en este departamento.
Por su parte, el Director de la Escuela tipo Federación de Guastatoya y el subdirector del CADEP, Romeo Archila, la calificaron como una mujer fuera de serie, además de ser una madre y maestra única, por sus cualidades.
Con muestras de suma consternación, el personal, ex alumnos, familiares y amigos, rindieron el último adiós a “la seño Gladys”, confiados en que alguien siga sus pasos para que el centro continúe brindando sus servicios a cientos de personas.
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