Varias mujeres sudanesas, entre ellas una reconocida periodista, fueron sentenciadas a recibir 40 latigazos por vestir "indecentemente" en público al salir a la calle con pantalón, informó hoy la cadena británica BBC.
La periodistas Lubna Ahmed al-Hussein, reconocida en Sudán por su columna "Los hombres hablan" que difunden varios periódicos, denunció que fue arrestada y condenada, junto con otras mujeres, a recibir 45 azotes por vestirse con pantalón.
En entrevista con la edición en lengua árabe de la BBC, dijo que ella y otras 12 mujeres que vestían pantalón fueron arrestadas en un restaurante de Jartum, capital sudanesa, por la policía que las acusó de "indecentes".
"Entre 20 o 30 policías entraron a un popular restaurante de Jartúm y arrestaron a todas las mujeres vestidas con pantalones. Yo vestía pantalón y una blusa", dijo.
La periodistas Lubna Ahmed al-Hussein, reconocida en Sudán por su columna "Los hombres hablan" que difunden varios periódicos, denunció que fue arrestada y condenada, junto con otras mujeres, a recibir 45 azotes por vestirse con pantalón.
En entrevista con la edición en lengua árabe de la BBC, dijo que ella y otras 12 mujeres que vestían pantalón fueron arrestadas en un restaurante de Jartum, capital sudanesa, por la policía que las acusó de "indecentes".
"Entre 20 o 30 policías entraron a un popular restaurante de Jartúm y arrestaron a todas las mujeres vestidas con pantalones. Yo vestía pantalón y una blusa", dijo.
Explicó que el uso de pantalón está prohibido por la shaira (ley islámica) que rige en Jartúm, a diferencia de las regiones del sur de Sudán, en las que predominan las religiones cristianas y de donde procedía la mayoría de las mujeres detenidas.
"Se supone que quienes no abrazan la fe musulmana no deben estar sujetos a las leyes islámicas, ni siquiera en Jartúm o en otros lugres del norte, de mayoría musulmana", destacó.
La periodista, quien también trabaja para la Misión de las Naciones Unidas en Sudán, dijo que algunas de las mujeres detenidas que de inmediato se declararon culpables recibieron cada una 10 latigazos y las dejaron ir, mientras que las que no confesaron fueron enviadas a la policía.
"Las chicas que fueron azotadas vestían igual que yo, no había diferencia, pero no fue igual", indicó.
Al Hussein dijo que ella y otras prefirieron hablar con sus abogados y ahora están esperando recibir su sentencia, que según la sharia sería de 40 latigazos.
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