Ecuador: Mujeres negras luchan por la inclusión social

“Padeces en el olvido, desde el momento de tu creación. Representas la pobreza, la pena y la marginación”.

Así cantaban los participantes en el encuentro donde se llevó a cabo el lanzamiento del proyecto Mirada Negra, que beneficiará a tres mil féminas afroecuatorianas de las provincias de El Oro, Guayas y Los Ríos.

“Vamos a sacar la negra adelante”, se titula el cántico entonado con entusiasmo, himno de la mujer afroecuatoriana, que condensa la situación de marginación y discriminación que le aqueja y la lucha tenaz que mantienen en pos de la plena integración social.

“Ecuador es un solo país”. “Basta ya de discriminación”, rezaban las leyendas de los carteles fijados en el escenario donde se ubicaron las dirigentes nacionales y provinciales de la Coordinadora de mujeres negras (CONAMUNE) y los invitados especiales al evento, entre ellos la titular del MIES, Rosa Manzo.

La promoción de la cultura afrolatinoamericana para el fortalecimiento de la cohesión social en el proceso de integración regional andino, es el objetivo final del proyecto, auspiciado por la Unión Europea y la Cooperación Internacional (COOPY), una ONG italiana, y ejecutado por la Coordinadora.

Ecuador, Colombia Perú y Bolivia es el radio de acción de la iniciativa, En el caso de nuestro país, engloba a las provincias de El Oro, Guayas y Los Ríos. El programa, cuya ejecución comenzó el 9 de diciembre del pasado año y se extenderá hasta finales de 2010, cuenta con un presupuesto de 555.474 euros.

“La propuesta apunta a la visibilización cultural, política, económica y social de los afrodescendiente así como potenciar sus capacidades y saberes ascentrales en la revalorización de las manifestaciones culturales para la aceptación e inclusión social”, explicó Julia Rentería, coordinadora provincial de las mujeres negras.

La dirigente, que preside la asociación “Ébano” de Santa Rosa, denunció la triple marginación social, económica, cultural y política que sufren las afroecuatorianas: por ser mujeres, por ser pobres y por ser negras. “No somos ni siquiera sujetos de crédito”, dijo.

Tenemos los mismos derechos. Tenemos derecho a ser tomadas en cuenta, subrayó, al tiempo que como ejemplos fehacientes de discriminación se refería a la ausencia de los afros en los ´puestos directivos de empresas, instituciones y organizaciones políticas.

Con respecto al último apartado, aludió al hecho de que apenas una mujer negra figura entre los candidatos auspiciados por los partidos y movimientos en El Oro, concretamente en la lista 70; al que hay que sumar un varón incluido en la del PRIAN.

No obstante, a pesar de las dificultades, cifró su esperanza en que el proceso de organización contribuirá a ir superando paulatinamente la discriminación secular y alcanzar el pleno ejercicio de los derechos que les asisten.

En El Oro, ya existen 7 organizaciones constituidas legalmente -6 en Machala y 1 en Santa Rosa, otras dos a punto de conseguir la personería jurídica y más de un centenar en el país, explicó Rentería, quien ejerce en Santa Rosa de coordinadora comunitaria del programa de VIH/SIDA impulsado por la fundación Quimera.

Si bien no existen cifras fiables, se estima que la población afro -ecuatoriana en todo el país es de aproximadamente 500.000, concentrada sobre todo en la provincia de Esmeraldas.En El Oro, de acuerdo con los datos del último censo del INEC, el número bordearía los 60 mil.

La presentación y socialización del proyecto, que estuvo a cargo de su coordinador, Martín Macías, incluyó la intervención de la presidenta estatal de la CONAMUNE, Livis González; y una reseña histórica de la organización, por parte de la dirigente local, la socióloga Isabel Orellana.

La CONAMUNE nació el 12 de septiembre de 1.999 durante el Primer Congreso Nacional de Mujeres Negras del Ecuador. Su sede está en Quito y tiene filiales en Pichincha, Esmeraldas, Guayas, El Oro, Imbabura, Carchi, Los Ríos, Sucumbíos, Orellana y Pastaza.

Presentar a la sociedad la realidad histórica, económica, social y cultural de las comunidades negras; promover acciones encaminadas a erradicar el racismo y la discriminación; dar una respuesta eficaz y sostenible a los problemas que enfrentan; reivindicar los derechos del pueblo afrodescendiente son sus principales cometidos.

Un mención aparte merece la intervención del grupo de danza esmeraldeño Tierra Verde, integrado por niños, adolescentes y jóvenes, que deleitó a la concurrencia con vistosos bailes afros.

Al culminar el acto, aún resonaba la última estrofa del himno de la mujer negra. “Adelante, despertemos, compañeras del futuro. Salgamos del conformismo, nos espera lo más duro...”.